Aún no ha amanecido y me levanto con la canción metida en las entrañas.
Salto de la cama y me acerco a los cristales empañados de la ventana que da frente a tu casa. Todo está en calma, nada se mueve y aún así canturreo la canción con la vana esperanza de que la escuches. Nada. Todo sigue a oscuras, quieto. Nada, ni nadie se mueve en la calle que baja desde la colina, con una suave pendiente hasta tu puerta.
Si al menos me oyeses cantar…
¿Es que no te has dado cuenta
De lo mucho que me cuesta ser tu amigo?
Me duele.
Me duele el decirte.
Y el callarme.
Y sin embargo, es ese desasosiego que me roe por dentro lo que me empuja a levantarme cada día con la ilusión de encontrarte y de mirarme pleno en tus ojos verdes….
Pongo la canción y subo el volumen del equipo de música que compré para ti. Pero no lo escuchas y nada cambia. No hay ruidos que me acompañen ni luces que rasguen la negra noche que se obceca en envolverme.
Solo miro hacia la calle y canto…
Necesito controlar tu vida
Saber quien te besa y quien te abriga.
Y es que tú no puedes alcanzar a imaginar hasta cuanto te necesito, y es mi alma entera la que se quebranta ante tu ausencia, aún sin haberte poseído.
Canturreo…
Ya no puedo continuar espiando
Día y noche tu llegar adivinando…
Ya no sé con qué inocente excusa
Pasar por tu casa...
Y espero. Voy de acá para allá y no me muevo. Imaginándote. Viéndote llegar titubeando ante tu casa. Ven, acércate mi vida y ven, párate un instante y escucha esta canción que te canto con todo el alma:
…aunque pueda parecerte un desatino
No quisiera yo morirme sin tener
Algo contigo...
Muy bonito el relato Antonio, sigue escribiendo asi de bien y deleitandonos con tu escritura tan buena.
ResponderEliminarMuchas gracias, Asrael
ResponderEliminarGracias por invitarme a disfrutar de tus relatos.
ResponderEliminarSiempre es un placer compartir aquello que uno siente. Gracias por leerlos.
ResponderEliminarMe hagustado tu entrada, me ha gustado esa manera de expresarte.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias, Josefina
ResponderEliminarOh lá, lá Antonio nos escribe un post intimo, me gusta, está lleno de sentimiento.
ResponderEliminarMe hace mucha gracia leerlo :-)
Besos
Abulafia
Ya sabes, de vez en cuando uno se deja ir. Claro que la música siempre ayuda y más, con letras como la de esta canción.
ResponderEliminarA mí también me alegra poder leerte.
Besos
Ya echo de menos algún relato....
ResponderEliminarAnimate!!
Es cierto, tienes razón. Voy a insistir.
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